El año 2006 le entregamos a la Intendencia de Santiago una propuesta para descontaminar Santiago. Elaboramos un documento en conjunto con todos los que quisieron colaborar en la comunidad Atina Chile. En esa oportunidad, una de mis propuestas era fomentar que las personas compartieran su auto para disminuir la cantidad de vehículos en las calles y con ello cuidar el medioambiente de manera civilizada y unida.
Las autoridades de la época no nos dieron ni bola. Un tal Víctor Barrueto ni siquiera tuvo la deferencia de recibirnos. Pero hoy existe un movimiento llamado «A Dedo» que está sumando gente y organizando a las personas para hacer realidad esta idea que, al menos yo, respaldo mucho y me llena de entusiasmo.
Si alguien piensa como yo y cree que compartir el auto es una buena medida para descontaminar el aire y descongestionar el tráfico, los invito a entrar a www.a-dedo.cl y registrarse. Yo ya lo hice, definí mi recorrido diario y estoy a la espera de pasajeros. ¡Les pido ayuda para promover esta noble iniciativa!