Una vergüenza: municipalidades discriminan a usuarios web

Llevo varios días intentando obtener mi impuesto para circular (mal llamado «permiso de circulación») vía web en alguna comuna de escasos recursos, con la intención de ayudar con un granito de arena. He tratado de pagar este impuesto en municipalidades de comunas como la de Licantén y la de Talcahuano, fuertemente afectadas por el terremoto del año pasado, sin embargo me obligan a usar un navegador lento e inseguro: Internet Explorer. Si no tengo ese navegador (ya sea porque uso Linux o cualquier otra razón), simplemente no puedo realizar el trámite.

Pero eso no es todo. Ante la imposibilidad de obtener el impuesto bajo esas condiciones (me obligan, en el fondo, a pagar por un sistema operativo que soporte a un navegador que -por alguna razón- ya no es usado ni siquiera por la mitad de los seres que habitan el planeta), decidí recurrir a municipalidades más «modernas», como la Municipalidad de Vitacura o la Municipalidad de Las Condes. Y me encontré con la sorpresa de que utilizan el mismo proveedor, aquél que me obliga a usar el ya arcaico Internet Explorer.

Esta medida discrimina y atenta contra la libertad de las personas, toda vez que no me permite, como usuario, elegir el navegador que yo desee (un navegador vigente y actualizado) usar para hacer cualquier trámite en la Web. Las municipalidades y reparticiones públicas en general tienen el deber ético de cumplir con los estándares del World Wide Web Consortium (W3C). Obligar a utilizar un software determinado, en cualquier circunstancia, es un acto de discriminación. Veamos algunos ejemplos para el bronce:

Les cuento que la empresa que provee el servicio para el pago online del impuesto para circular, a algunas de estas municipalidades, se llama SMC Sistemas Modulares de Computación. Esta empresa está simplemente abaratando costos aprovechando la ignorancia reinante en los «equipos informáticos» de las municipalidades.

¿Qué opinan?